En este artículo de Mari Cruz Díaz, presidenta de la ANIA, repasa la historia de España y como durante toda esta, así como sucede en la actualidad, han existido las sequías en nuestro país. En él repasa la actualidad política y de otras índoles sociales relacionándola con la sequía.
La sequía existía mucho antes del cambio climático
En el artículo, Mari Cruz trata de explicarnos que "No podemos permitirnos el lujo de dejar a las autoridades políticas que sigan trabajando de manera descoordinada". Es por ello que la periodista tiene en cuenta a los ciudadanos, porque sufriremos las consecuencias de esta inacción y descoordinación de nuestros políticos en cuanto a la reducción del CO2 emitido comenta la autora.
Para 2050, habrá que producir un 50% más de comida...
Este argumento, que sostiene Mari Cruz hace referencia a una advertencia que lanzó la FAO (ONU para la Alimentación y Agricultura). Básicamente este aumento es necesario para que toda la población mundial esperada en 2050 pueda alimentarse, el problema es que si se dan episodios climáticos como los que vivimos actualmente, pero incluso a mayor escala, los precios aumentarán hasta tal punto, que muchas clases sociales se verán afectadas.
Antes también había sequías
Y es que un punto que poco se tiene en cuenta, o que se olvida rápido, es el pasado, y es que tal y como se indica en el artículo, en el pasado también tuvieron sequías. Algunas fueron paliadas primeramente con "guerras y rezos" y conforme se avanzó en investigaciones con más base (o al menos algo de base) científica se utilizaron técnicas aprendidas de árabes y romanos como una mejor planificación hidrológica o mejores infraestructuras...
El problema actual, donde hay sol, no hay lluvia
Tan fácil como eso, para producir alimentos, se necesitan radiación y temperatura (horas de sol y buena temperatura). Pues bien, esto no suele ir ligado, así que como comenta la autora, o bien se traslada agua, o bien energía. Y como bien comenta Mari Cruz, pese a que pueda sonar tentador, blasfemar contra el cambio climático y pedirle explicaciones, no es la solución. En países como el nuestro, indica que es necesaria una planificación a largo plazo, que tenga en cuenta las variables tanto de costes como de beneficios.
Algunas soluciones realistas
Por último la autora, nos enumera algunas posibles soluciones:
- Planificación hidrológica a nivel nacional.
- Acabar el proceso de modernización del regadío.
- Impulsar el uso de la biotecnología.
- Optimizar la eficacia de los recursos empleados.
Recordarles a nuestros lectores que nuestra tubería microperforada consigue reducir la evaporación que se produce en las balsas de riego. Por último, Oxifuch se une al sector del campo debido a la situación que están pasando y les ofrece todo su ánimo y apoyo.
